Rescatando los recuerdos

10 noviembre 2017 - Noticias y Novedades - Comentar -

 Fotografías con Historia

- ¿Podria usted arreglarme esta fotógrafía?

  Me preguntó con cierta pena y resignación un caballero tras sacar de su cartera una pequeña y muy estropeada fotografía partida y pegada con celofan. Posiblemente llevaba muchos años ahí guardada acompañándole alli donde iba y  que a pesar del cariño con que estaba protegida el inesorable paso del tiempo había hecho inevitable su deterioo. Aún así el hombre no quiere dejar de llavarla encima.

  La cojo con mucho cuidado y a pesar de su mal estado, tenemos la gran suerte de que los rotos y las manchas no nos ocultan partes de la imagen que sean imposibles de reparar, añadiendo a nuestro favor que aun siendo pequeña, era de aquellas cámaras cuyos negativos eran de buen tamaño y las copias fotógraficas (El Positivado) se hacía por contacto, con lo cual normalmente la calidad era bastante aceptable, ademas de que el papel sobre la que se imprimió era sin textura.. en fín que para mi satisfacción y alegria del poseedor de la fotografía podia prometerle buenos resultados.

 Después de darle la buena noticia por su acento, aunque no demasiado pronunciado, le pregunto si era de Córdoba, a lo que el hombre, sorprendido por llevar desde los once años en Málaga, confirma que  es de un pueblo cordobés y me cuenta como llegó aquí a trabajar de aprendiz en un bar cuando la feria aún la ponian en el Parque... Ya ha llovido desde entonces, mis únicas referencias de esto las tengo por mi padre. Tambien me cuenta cómo despues de eso, y casi sin darse cuenta, al final se quedó en Málaga de esto ya hace mas de sesenta años..

 Una vez limpiada con sumo cuidado la foto original de los residuos de la cinta adhesiva que unía algunas partes, ( aunque esto no suelo hacerlo, en esta ocasión era necesario antes de ser escaneada), y tras todo eso, meticulosamente restaurada digitalmente, es inevitable que al encontrarte con imágenes como esta,  durante el proceso te encuentras con que las historias vienen y van mientras recompones el pasado. Imposible dejar de fantasear sobre las vidas de las figuras que protagonizan la fotografía, y sentirse satisfecho de rescatarlas de su ajados estados. Volver a darles vida siempre buscando ser lo mas fiel a lo que pudo ser el original, su textura, su tono, si estuvo virada o era de blanco y negro.... 

 Pasados unos días tras ese casí místico proceso llame a mi nuevo amigo cordobés, expectante al momento de que viese el resultado de nuestro trabajo, trabajo que en estos casos es más que satisfactorio al contemplar la cara de emoción de la persona que ve nuevamente revivida su fotografia,en la que del brazo de la que luego fué su mujer, paseaba por su pueblo junto con la bici con la que corrió varias vueltas a Andalucía. 

Gracias amigo Alfonso por dejarnos que su foto nos cuente tantas cosas. 

 
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